Este es el retrato indignante de la irresponsable destrucción de la selva en el pueblo de Guacamayo, en Madre de Dios. Donde antes hubo verdor, solo hay tierra sin vida.
Pese al peligro, un trabajador sigue en la búsqueda ilegal de oro en Lamal.
Los pueblos de la zona dependen de la minería ilegal.
Impactante documental. Hoy se presenta el trabajo fílmico que revela el mundo real y clandestino de la minería ilegal, el aniquilamiento de los ecosistemas y el trabajo que acaba con la Capital de la Biodiversidad. Donde hubo selva, solo hay tierra.
Milagros Berríos.
Dos avezados corresponsales de guerra llegan a Madre de Dios y se horrorizan. ¿Qué puede ser peor para ellos que ver la muerte de cerca en Afganistán o Kosovo? Pues verla pasar lentamente. Descubren otros conflictos humanos que, con la paciencia de un experimentado asesino y la impulsividad de un suicida, acaban con la Amazonía. Tres años después de su incursión, la guerra continúa. Madre de Dios está siendo arrasada por la minería ilegal. La Capital de la Biodiversidad se está cortando las venas.
En la selva, la extracción del codiciado oro avanza a pasos agigantados. Se eleva de la mano de su alto precio, así como de su rentabilidad y las dificultades para controlar su procesamiento ilegal. Su extensión ha generado la rápida deforestación de amplias zonas de nuestra selva.
El biólogo peruano Enrique Ortiz acompañó a dos periodistas norteamericanos. Ron Haviv y Donovan Webster, cámara en mano y curiosidad a flor de piel ingresaron a los ya no tan espesos bosques de Puerto Maldonado. Ahí, donde las aves batallan contra el ruido de las motosierras, el agua de los ríos se convierte en un perturbador líquido marrón y el hombre, sin piedad, se abre paso. Donde hubo selva, hoy quedan rocas.
"Es muy fuerte tener que ver a las aves defendiendo un territorio cuando sabes que en una semana ya no va a existir... Genera frustración", dice Ortiz, quien hace 25 años trabaja en la selva, conoce sus debilidades, investiga su riqueza y a las especies que se van.
La tasa de deforestación de los bosques en el Perú se multiplica desde los 90. Según César Ipenza, de la Sociedad Peruana de Derecho Ambiental (SPDA), hasta febrero de 2011, se había deforestado cerca de 32 mil hectáreas en Madre de Dios. Además, expertos estiman que lo que queda de los bosques tropicales podría ser destruido en cerca de cuarenta años.
EL PRECIO DEL ORO
La mayoría del oro que se extrae en nuestra amazonía es ilegal. Su extracción está acompañada de la deforestación, contaminación y aniquilación de especies del mar, del aire y árboles de, incluso, más de mil años de antigüedad.
Sin embargo, ¿cuál es la especie más afectada? –interrumpe Ortiz–, pues, el homo sapiens. Para el biólogo, esto es un "harakiri al estilo peruano".
Y falta más. La importante selva amazónica no solo es privada de su vida, sino está siendo contaminada para siempre con mercurio, producto de la actividad ilegal.
Existen decretos legislativos, mecanismos e intentos de formalizar la minería; sin embargo, la intención se pierde en el camino. Y es que si bien, para el especialista, el principal problema es la falta de gobernabilidad, hoy la solución está en manos de la población.
"Los ministros no pueden hacer nada contra las mafias, la gente debe reaccionar sobre los niveles de contaminación... Van a repensarlo", insiste Ortiz. Confía en que la población va a acabar con la minería ilegal.
Dos avezados corresponsales de guerra llegan a Madre de Dios y se horrorizan. ¿Qué puede ser peor para ellos que ver la muerte de cerca en Afganistán o Kosovo? Pues verla pasar lentamente. Descubren otros conflictos humanos que, con la paciencia de un experimentado asesino y la impulsividad de un suicida, acaban con la Amazonía. Tres años después de su incursión, la guerra continúa. Madre de Dios está siendo arrasada por la minería ilegal. La Capital de la Biodiversidad se está cortando las venas.
En la selva, la extracción del codiciado oro avanza a pasos agigantados. Se eleva de la mano de su alto precio, así como de su rentabilidad y las dificultades para controlar su procesamiento ilegal. Su extensión ha generado la rápida deforestación de amplias zonas de nuestra selva.
El biólogo peruano Enrique Ortiz acompañó a dos periodistas norteamericanos. Ron Haviv y Donovan Webster, cámara en mano y curiosidad a flor de piel ingresaron a los ya no tan espesos bosques de Puerto Maldonado. Ahí, donde las aves batallan contra el ruido de las motosierras, el agua de los ríos se convierte en un perturbador líquido marrón y el hombre, sin piedad, se abre paso. Donde hubo selva, hoy quedan rocas.
"Es muy fuerte tener que ver a las aves defendiendo un territorio cuando sabes que en una semana ya no va a existir... Genera frustración", dice Ortiz, quien hace 25 años trabaja en la selva, conoce sus debilidades, investiga su riqueza y a las especies que se van.
La tasa de deforestación de los bosques en el Perú se multiplica desde los 90. Según César Ipenza, de la Sociedad Peruana de Derecho Ambiental (SPDA), hasta febrero de 2011, se había deforestado cerca de 32 mil hectáreas en Madre de Dios. Además, expertos estiman que lo que queda de los bosques tropicales podría ser destruido en cerca de cuarenta años.
EL PRECIO DEL ORO
La mayoría del oro que se extrae en nuestra amazonía es ilegal. Su extracción está acompañada de la deforestación, contaminación y aniquilación de especies del mar, del aire y árboles de, incluso, más de mil años de antigüedad.
Sin embargo, ¿cuál es la especie más afectada? –interrumpe Ortiz–, pues, el homo sapiens. Para el biólogo, esto es un "harakiri al estilo peruano".
Y falta más. La importante selva amazónica no solo es privada de su vida, sino está siendo contaminada para siempre con mercurio, producto de la actividad ilegal.
Existen decretos legislativos, mecanismos e intentos de formalizar la minería; sin embargo, la intención se pierde en el camino. Y es que si bien, para el especialista, el principal problema es la falta de gobernabilidad, hoy la solución está en manos de la población.
"Los ministros no pueden hacer nada contra las mafias, la gente debe reaccionar sobre los niveles de contaminación... Van a repensarlo", insiste Ortiz. Confía en que la población va a acabar con la minería ilegal.
ORO AMAZÓNICO
Pese a que se intente ocultar, el daño cada vez es más evidente. Para comprobarlo, Ortiz, Haviv y Webster en agosto de 2010 llegaron a Madre de Dios.
Ahí, fueron testigos de las operaciones clandestinas que se desarrollan en los bosques. Ingresaron a las zonas donde no se recibe a visitantes, donde la actividad ilegal va carcomiendo las áreas verdes. Llegaron a la hoy destruida zona minera de Lamal, también a Mazuco, Huaypetue, entre otras. Este recorrido se convirtió en Oro Amazónico.
Este documental, bajo la dirección de Reuben Aaronson, registra la tragedia y el envenenamiento del ambiente producto de la minería ilegal en Madre de Dios. Demuestra las pérdidas, las necesidades y la miserable explotación de la tierra para obtener una ganancia aún más miserable.
"Durante las grabaciones fuimos testigos de inmensos hoyos con tamaños de canchas de fútbol americano que fueron creados en solo una semana... Cada hoyo destruye árboles de mil años de antigüedad y cientos de especies de plantas y animales que solían vivir en estos árboles. Va a tomar, por lo menos 500 años para que estos ecosistemas vuelvan a ser lo que eran", cuenta Aaronson.
Humildes pobladores del altiplano, con muchas necesidades y pocas oportunidades, llegan a la selva por trabajo. Buscan dinero para abrir un negocio o alimentar a sus familias, sin importar las consecuencias catastróficas de su salud y de su tierra. "No es un mal trabajo si puedes obtener oro; sin embargo, esta labor podría matarlos", insiste. Y es que en apenas tres años, los nuevos "mineros" podrían perder sus funciones motoras. Así, Oro Amazónico reafirma e insiste en el derecho de la selva amazónica de existir como fuente de biodiversidad y no de codicia humana.
Por su parte, la productora Sarah Dupont destaca la dificultad de la filmación. "El riesgo era mayor al saber que la grabación de esta minería ilegal no sería bien recibida". Sin embargo, lograron su misión: reflejar la guerra, el ecocidio.
Detrás de este documental, hay grandes nombres y conocidos personajes, como el actor Andy García, cuya voz relata en español el agónico destino de Madre de Dios, un tesoro peruano que, primero, es recordado por el mundo Oro Amazónico es un grito a la conciencia, un pedido a la población para frenar el ciclo de su destrucción.
Los realizadores creen que es posible cumplir su misión, generar un gran impacto, incluso, a nivel mundial. Este documental es un viaje a lo largo de Madre de Dios para mostrar estebosque prístino y no llegar, nunca, a su desenlace.
Pese a que se intente ocultar, el daño cada vez es más evidente. Para comprobarlo, Ortiz, Haviv y Webster en agosto de 2010 llegaron a Madre de Dios.
Ahí, fueron testigos de las operaciones clandestinas que se desarrollan en los bosques. Ingresaron a las zonas donde no se recibe a visitantes, donde la actividad ilegal va carcomiendo las áreas verdes. Llegaron a la hoy destruida zona minera de Lamal, también a Mazuco, Huaypetue, entre otras. Este recorrido se convirtió en Oro Amazónico.
Este documental, bajo la dirección de Reuben Aaronson, registra la tragedia y el envenenamiento del ambiente producto de la minería ilegal en Madre de Dios. Demuestra las pérdidas, las necesidades y la miserable explotación de la tierra para obtener una ganancia aún más miserable.
"Durante las grabaciones fuimos testigos de inmensos hoyos con tamaños de canchas de fútbol americano que fueron creados en solo una semana... Cada hoyo destruye árboles de mil años de antigüedad y cientos de especies de plantas y animales que solían vivir en estos árboles. Va a tomar, por lo menos 500 años para que estos ecosistemas vuelvan a ser lo que eran", cuenta Aaronson.
Humildes pobladores del altiplano, con muchas necesidades y pocas oportunidades, llegan a la selva por trabajo. Buscan dinero para abrir un negocio o alimentar a sus familias, sin importar las consecuencias catastróficas de su salud y de su tierra. "No es un mal trabajo si puedes obtener oro; sin embargo, esta labor podría matarlos", insiste. Y es que en apenas tres años, los nuevos "mineros" podrían perder sus funciones motoras. Así, Oro Amazónico reafirma e insiste en el derecho de la selva amazónica de existir como fuente de biodiversidad y no de codicia humana.
Por su parte, la productora Sarah Dupont destaca la dificultad de la filmación. "El riesgo era mayor al saber que la grabación de esta minería ilegal no sería bien recibida". Sin embargo, lograron su misión: reflejar la guerra, el ecocidio.
Detrás de este documental, hay grandes nombres y conocidos personajes, como el actor Andy García, cuya voz relata en español el agónico destino de Madre de Dios, un tesoro peruano que, primero, es recordado por el mundo Oro Amazónico es un grito a la conciencia, un pedido a la población para frenar el ciclo de su destrucción.
Los realizadores creen que es posible cumplir su misión, generar un gran impacto, incluso, a nivel mundial. Este documental es un viaje a lo largo de Madre de Dios para mostrar estebosque prístino y no llegar, nunca, a su desenlace.
Documental producido por extranjeros
La filmación de Oro Amazónico (Amazon Gold) duró poco más de dos semanas.
Se realizaron dos viajes. El primero fue de planificación, mientras que en el segundo se realizó la filmación.
Se obtuvo 26 horas de imágenes en varias zonas de Madre de Dios.
El director Reuben Aaronson ha creado filmes para National Geographic, Discovery, HBO y otras cadenas de televisión. Actualmente, se encuentra trabajando en dos proyectos en el Perú: Buscando Vilcabamba y 26 días en el Perú.
Se obtuvo 26 horas de imágenes en varias zonas de Madre de Dios.
El director Reuben Aaronson ha creado filmes para National Geographic, Discovery, HBO y otras cadenas de televisión. Actualmente, se encuentra trabajando en dos proyectos en el Perú: Buscando Vilcabamba y 26 días en el Perú.
La productora Sarah Dupont es la presidenta de la Amazon Aid Foundation, organización que promueve la investigación científica sobre la región Amazonas.
El productor James Carvallo desarrolló una exposición itinerante titulada "La Selva Amazónica: el tesoro que desaparece".
El productor James Carvallo desarrolló una exposición itinerante titulada "La Selva Amazónica: el tesoro que desaparece".
En la versión en inglés participan la actriz Sissy Spacek y el músico Herbie Hancock.
En cifras
2010 Fue el año en el que se filmó el documental Oro Amazónico.
30.000 mineros realizan operaciones en varias zonas de Madre de Dios. Operan equipos cada vez más pesados y sofisticados.
FUENTE: http://www.larepublica.pe/11-08-2013/oro-amazonico-una-mirada-a-las-tierras-arrasadas-en-madre-de-dios#!foto1
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