Es la hora de partir
El martes 27 de noviembre a las 7:16 pm, Ana Lucía Ramos, empleada de LAN en el aeropuerto de Arequipa, cerró el vuelo que debía partir a las 7:20 pm a Lima. Nada extraordinario para esta joven de 24 años. Advertida por la lista de pasajeros que el Ministro de Trabajo, José Villena, debía partir en ese vuelo, lo había buscado en la sala de embarque. No había llegado. Por tanto, por respeto a quien llega puntualmente a donde tiene que llegar, realizó el procedimiento a través del cual se cierra la puerta para iniciar el proceso de presurización del avión. Cuando Ana Lucía ingresó desde la plataforma a la sala de embarque y el piloto ya encendía los motores, observó a un sujeto que, fuera de sí, exigía subirse al avión entre improperios y amenazas. Cuando ella, en uso de sus atribuciones, trató de impedir el paso del sujeto, este la empujó “con las dos manos” produciéndole un moretón en el brazo. Felizmente fue sujetada por sus compañeros y no cayó al piso. Mientras tanto, el hombre, hecho un energúmeno, tomaba fotos de los trabajadores con su celular amenazándolos con dejarlos sin trabajo y, finalmente, identificándose, paradójicamente, como el ministro de Trabajo.
Lo que aquí narro consta en la denuncia policial realizada por la víctima en la comisaría del aeropuerto esa misma noche. Lo corrobora un examen médico legista efectuado a las 9:00 am del miércoles 27 que autorizó tres días de descanso médico por el dolor que le quedó en el hombro. Estos documentos recién se han hecho públicos el jueves 6 de diciembre, más de una semana después de los actos. ¿Por qué? Porque, como muchas mujeres agredidas en el Perú, la víctima retiró su denuncia.
Sin embargo, como la información parcial se filtró, el viernes 30 el ministro prepotente le dijo a RPP, saliendo al paso, que todo era falso y que no existía ninguna agresión. Sin embargo, su principal víctima explicó el fin de semana, elocuentemente, que había retirado la denuncia porque ella no tenía el “poder” de su agresor.
Pasó el fin de semana, ¿y el gobierno? Mudo. El martes, ante la bola de nieve, el ministro fue a Arequipa a ofrecer disculpas en privado. Bien por él, pero primera mentira reconocida. Evidentemente había pasado algo digno de ser perdonado. Pero el ministro insistió, por medio de un comunicado, en que no hubo agresión física. El miércoles, el primer ministro salió a respaldarlo tratando inútilmente de cerrar el incidente. El jueves, conocido el peritaje, fue el propio Villena el que tuvo que salir a dar disculpas públicas. Lamentablemente, volvió a mentir e insistió en que no hubo agresión física, lo cual, siendo vergonzoso, está acreditado en la documentos que no lograron desaparecer.
El viernes, Nadine Heredia, rodeada de ministras mujeres, dijo que Villena “tendrá que dar las explicaciones a las instancias que correspondan”. ¿Así nomás? ¿Tan calladitas todas? ¿Puede un hombre que no tiene dominio de sus pataletas y que le mete un empujón a una mujer ser ministro de Estado?
Hoy mantenerlo en el puesto es responsabilidad del presidente y, eventualmente, del Congreso si lo censura. Si el ministro llegó tarde a su vuelo, que el presidente sea puntual y no retrase hoy su partida. Mejor a su casa y sin escalas.
Hoy mantenerlo en el puesto es responsabilidad del presidente y, eventualmente, del Congreso si lo censura. Si el ministro llegó tarde a su vuelo, que el presidente sea puntual y no retrase hoy su partida. Mejor a su casa y sin escalas.
http://www.larepublica.pe/columnistas/contracandela/es-la-hora-de-partir-09-12-2012
http://www.larepublica.pe/carlincaturas/carlincaturas-04-12-2012-2012-12-04
DIPLOMACIA
La imagen de un "embajador" ecuatoriano dándole revistazos a una peruana y a la hija de esta graficará un inmortal capítulo de la historia de la torpeza diplomática, si entendemos la diplomacia como la ciencia que estudia y practica las relaciones cordiales entre países y que ser diplomáticos es ser hábil y sagaz en el trato con las personas.
Claro que hasta hoy la atención estaba dirigida a si fue jamón de pavo, jamón o jamonada lo que inició la descomunal gresca binacional. Esto en el entendido de que si fuera jamón sería una razón más selecta para beneficio de los defensores del embajador. De haber sido jamonada o jamón de pavo, le incorporaría algo de grasa a su publicitado acto de defensa.
Rodrigo Riofrío, el diplomático, dice que actuó en defensa propia pues amenazaban su integridad y, tras recibir una cachetada, tuvo que repelerlas con una revista. No ha trascendido qué revista era, lo cual daría valor a la discusión ya que no es lo mismo dar revistazos con un Vanidades, por ejemplo, que con un ejemplar de esta revista Domingo o por último con una revista Playboy .
Diversos expertos deberían analizar también si la patada televisada que propinó posteriormente Riofrío fue defensiva o la dio en posición de ataque. Esto nos daría una idea de cómo entrena y educa a sus embajadores el vecino país. Aclararíamos quizás que la respuesta sería a puño y patada voladora limpia de haber sido un hombre el agresor.
Al respecto, aunque usted no lo crea, a Rafael Correa le duele en el alma que se deterioren las relaciones con el Perú por este motivo. Así lo declaró ayer después de canturrear la Flor de la Canela. "Nuestro embajador no es culpable, y prefiero renunciar a sacrificar a un inocente. Si nuestro embajador Riofrío no regresa a Lima, Javier León, el embajador peruano, no regresará a Quito", sentenció.
"Si se tienen que afectar las excelentes relaciones que tenemos con Perú, qué pena. Pero yo no voy a traicionar a la verdad", enfatizó cálidamente el mandatario. La firmeza del presidente, símil de su embajador frente a estas situaciones, está inspirada en la verdad. La verdad que sostiene él, desde luego. En Ecuador solo existe una verdad, la que expresa Rafael Correa. Y en esta ocasión la quiere exportar a nuestro país sin pasar por aduanas.
Que debe existir responsabilidad de las peruanas agresoras, que la sobrina del embajador también fue agredida, que en el extremo los primeros insultos y las agresiones físicas los iniciaron la señora Castro y su hija, es posible.
Pero que quieran mantener a Riofrío como embajador en nuestro país, aquel que trascendió por llevado el arte de la diplomacia a uno de los niveles más rampantes de nuestra historia común, resulta realmente inaceptable.
FUENTE: Revista DOMINGO de LA REPÚBLICA. 5 de mayo del 2013. p.02
http://www.larepublica.pe/carlincaturas/carlincaturas-04-12-2012-2012-12-04
Lima
Embajador de Ecuador en Perú es acusado de golpear a dos mujeres en supermercado
"Nos trató de serranos, ignorantes e indígenas", contó una de las víctimas de la agresión.
Rodrigo Riofrío Machuca, embajador de Ecuador en Lima, golpeó e insultó a una madre e hija, tras un incidente en un supermercado de Magdalena del Mar.
Cristina Castro, víctima del embajador, relató al programa Día D que Riofrío Machuca la insultó a ella y a su hija y luego las empezó a patear. Los hechos ocurrieron el 21 de abril, al promediar las 9:30 p.m.
“Así son estos peruanos, ignorantes, por eso es que este país no avanza, porque está lleno de indígenas”, les dijo el diplomático ecuatoriano.
En tanto, cuando la hija de Castro fue a increparle a Riofrío Machuca, este le propinó una cachetada. Y fue en ese momento donde las empezó a golpear.
“Nos trató de serranos, ignorantes e indígenas, que éramos unos cholos de mierda”, contó.
FUENTE: http://www.larepublica.pe/29-04-2013/embajador-ecuatoriano-golpeo-dos-mujeres-en-supermercado
Embajador ecuatoriano pidió disculpas por agresión a peruanas.
"Es mi deber manifestar que en ningún momento vertí expresiones que podrían ofender al pueblo del Perú, por el que siento profundo respeto", señaló a través de un comunicado.
El embajador de Ecuador en Lima, Rodrigo Riofrío Machuca, quien fue denunciado por un hecho de agresión a dos mujeres peruanas en un supermercado de Magdalena del Mar, pidió disculpas hoy lunes por lo que calificó de una "situación no deseada".
“Lamento profundamente el incidente personal suscitado el pasado domingo 21 de abril de 2013, en el Distrito de Magdalena y que tuvo como origen una agresión física que recibí junto a un miembro de mi familia, ante la cual nos limitamos a defendernos", precisó.
A través de un comunicado del Ministerio de Relaciones Exteriores, Comercio e Integración del Ecuador, el diplomático aseguró que en ningún momento vertió expresiones ofensivas contra el pueblo peruano.
"Presento mis disculpas públicas a todas las peruanas y peruanos por una situación no deseada, ni provocada por mí", manifestó.
Riofrío Machuca aprovechó para reiterar su compromiso de trabajo constante, en calidad de embajador, para continuar fortaleciendo las relaciones bilaterales entre Ecuador y el Perú.
"Agradezco al Perú la hospitalidad que en todo momento ha demostrado hacia mi persona y particularmente hacia la comunidad ecuatoriana residente en este país. Hago votos por que este incidente no afecte la cordialidad natural que existe entre nuestros pueblos", resaltó.
FUENTE: http://www.larepublica.pe/29-04-2013/embajador-ecuatoriano-pidio-disculpas-por-agresion-peruanas
La imagen de un "embajador" ecuatoriano dándole revistazos a una peruana y a la hija de esta graficará un inmortal capítulo de la historia de la torpeza diplomática, si entendemos la diplomacia como la ciencia que estudia y practica las relaciones cordiales entre países y que ser diplomáticos es ser hábil y sagaz en el trato con las personas.
Claro que hasta hoy la atención estaba dirigida a si fue jamón de pavo, jamón o jamonada lo que inició la descomunal gresca binacional. Esto en el entendido de que si fuera jamón sería una razón más selecta para beneficio de los defensores del embajador. De haber sido jamonada o jamón de pavo, le incorporaría algo de grasa a su publicitado acto de defensa.
Rodrigo Riofrío, el diplomático, dice que actuó en defensa propia pues amenazaban su integridad y, tras recibir una cachetada, tuvo que repelerlas con una revista. No ha trascendido qué revista era, lo cual daría valor a la discusión ya que no es lo mismo dar revistazos con un Vanidades, por ejemplo, que con un ejemplar de esta revista Domingo o por último con una revista Playboy .
Diversos expertos deberían analizar también si la patada televisada que propinó posteriormente Riofrío fue defensiva o la dio en posición de ataque. Esto nos daría una idea de cómo entrena y educa a sus embajadores el vecino país. Aclararíamos quizás que la respuesta sería a puño y patada voladora limpia de haber sido un hombre el agresor.
Al respecto, aunque usted no lo crea, a Rafael Correa le duele en el alma que se deterioren las relaciones con el Perú por este motivo. Así lo declaró ayer después de canturrear la Flor de la Canela. "Nuestro embajador no es culpable, y prefiero renunciar a sacrificar a un inocente. Si nuestro embajador Riofrío no regresa a Lima, Javier León, el embajador peruano, no regresará a Quito", sentenció.
"Si se tienen que afectar las excelentes relaciones que tenemos con Perú, qué pena. Pero yo no voy a traicionar a la verdad", enfatizó cálidamente el mandatario. La firmeza del presidente, símil de su embajador frente a estas situaciones, está inspirada en la verdad. La verdad que sostiene él, desde luego. En Ecuador solo existe una verdad, la que expresa Rafael Correa. Y en esta ocasión la quiere exportar a nuestro país sin pasar por aduanas.
Que debe existir responsabilidad de las peruanas agresoras, que la sobrina del embajador también fue agredida, que en el extremo los primeros insultos y las agresiones físicas los iniciaron la señora Castro y su hija, es posible.
Pero que quieran mantener a Riofrío como embajador en nuestro país, aquel que trascendió por llevado el arte de la diplomacia a uno de los niveles más rampantes de nuestra historia común, resulta realmente inaceptable.
FUENTE: Revista DOMINGO de LA REPÚBLICA. 5 de mayo del 2013. p.02
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